Es cierto, pero cuando empiezas, te encuentras con determinados problemas que ves cómo resuelven otros, y los incorporas a tu manera para adaptarlo a tus necesidades. Veo videos, por ejemplo, de elivelimen, y son una enciclopedia de afeitado; no aspiro a ello, pero es cierto que te da muchas pistas sobre cómo hacer las cosas bien hechas y, cuando más aprendes, más te das cuenta de lo que te falta.
En mi caso, como se ve en el vídeo, no me atrevo a hacer contra con la mano zurda pero, tras pillar las posturas, me voy apañando: y esas posturas las copio y adapto a mis necesidades según mis características; en la primera pasada, parece que hago una contra en la zona de izquierda del cuello (justo cuando estoy terminándolo), bien, pues en realidad es que, caprichos de la naturaleza, ahí me crece el pelo en esa dirección. Y, viendo videos, entiendes por qué hay gente que usa una u otra dirección al utilizar la navaja.
Por otro lado, decir que llevo muy pocos afeitados y, quitando alguno de los 10 primeros, no todos, más o menos he conseguido un buen apurado y he tenido muy pocos cortes. Lo digo porque a muchos les da miedo la navaja, y yo he visto que, si me he cortado, medio segundo antes, siempre he sabido que iba a cortarme y, si lo he hecho, ha sido por cabezonería. También es cierto que la navaja tiene punta redonda y, quizá, con una punta francesa o española tendría el cuello o las orejas acordándose de mi madre… y me pica tener una para pefilar.
Decir que ahora llevo bigote y perilla, pero al principio de afeitarme así, no. Al inicio el bigote no me dio problemas, pero la barbilla sí, era lo que tenía que terminar con la Merkur sí o sí; pero poco después ya no hizo falta y me iba saliendo medio decente. Ahora me da cierto miedo que se me vaya esa memoria en las manos que cogí, y que cuando me vuelva a afeitar completo, tenga que empezar otra vez a aprender a afeitarme esa zona.