A ver 2 cosas…
En el artículo dice que los japoneses tradicionalmente usaban piedras de afilado naturales lubricadas con agua, y que el usar aceite en piedras de agua reduce su efectividad…pero no aporta una justificación científica, lo da como un hecho que hay que creerse y ya…y puede que sea verdad, no digo que no, pero me gusta saber el por qué de las cosas…
“The Japanese traditionally used natural sharpening stones lubricated with water (using oil on a waterstone reduces its effectiveness).”
Dicho lo anterior, y al respecto de las sartenes sucias…¿¿estamos comparando el limpiar una sartén con restos de comida carbonizados (a nivel molecular), aceites degradados y en superficies metálicas tratadas con infinidad de aditivos, con limpiar una piedra a la que se le ha echado aceite y sobre la que se ha afilado un acero ayudado con el propio barrillo que se ha generado mediante el pulido de la propia piedra???. No lo veo claro…pero insisto, puede que yo esté equivocado.
Pregunta: esa misma sartén, limpia, y sin cocinar nada sobre ella, si le echas aceite, lo extiendes, y luego le echas el agua del grifo a ser posible calentita, y la secas bien con un papel…¿de verdad que se le queda el aceite?, ¿lo has probado en casa?..y no me digas que: “bueno, sigue teniendo una superficie aceitosa”, porque como sabras, lo que se busca es que las superficies de las sartenes sean antiadherentes y dichos tratamientos le dan una textura que al tacto es aceitosa desde el momento que la compras…
En cualquier caso Joaquín, no se trata de discutir ni contigo ni con nadie, y tampoco digo que lo que dices no sea cierto, lo único que pasa es que me gusta pensar por mi mismo y no creerme las “verdades” que nos sueltan sin darles alguna vuelta y tratar de encontrarles una explicación científica.
Por cierto, he investigado un poco más el tema de las japonesas, y pudiera ser que el aceite reaccione con algunas sustancias que las conforman y haga que las propiedades de dichas piedras varíen…y eso iría por el camino de lo que indicaba @MacMody, es decir es un problema químico, y no físico.