Apuntes históricos sobre el afeitado y las navajas

Buenos días,

Comparto este texto extraído de la vieja Enciclopedia Universal Iustrada Espasa-Calpe. Tomo 37, págs 1262 a 1265. Se trata de una entrada que incluye alguna información interesante sobre el afeitado -y las navajas en particular- desde un punto de vista histórico. Aunque la edición es de 1975 creo que este texto es del volúmen escrito en 1918; más que nada a efectos de contextualizar el estilo, información y redacción. Espero resulte de interés.

Navaja. Hist. El empleo de la navaja de afeitar desde la más remota antigüedad, está demostrado por monumentos y utensilios. Son numerosas las esculturas egipcias en que aparece rasurado el rostro de las figuras y completamente afeitado el cráneo. Es muy probable que las primeras navajas fuesen laminillas de cuarzo ó de obsidiana, siendo inútil el experimento que realizó Forrer (V. su Reallexikon, pág. 646) para probar la eficacia de estas materias, puesto que al llegar Cortés a Méjico los barberos indígenas empleaban en su trabajo laminillas de obsidiana, y porque hasta comienzos del siglo XIX los coptos empleaban navajas de sílex. Durante la Edad de Bronce fue corriente el uso de navajas de este metal en toda Europa. El arte egeo, micénico, sardo y escandinavo abunda en representaciones de hombres completamente rasurados. Los griegos decían epi aerum akmes: <<la cosa está sobre el filo de una navaja>>, frase proverbial que se encuentra ya en la Ilíada (canto X, v. 168-173): Cuando Néstor, en compañía de Ulises, despierta á Diomedes Tidida, á una observación que éste le hace responde: <<Sí, hijo mío, oportuno es cuanto acabas de decir. Tengo hijos excelentes y muchos hombres que podrían ir á llamarlos, pero es muy grande el peligro en que se hallan los aqueos: en el filo de una navaja de afeitar están ahora la triste muerte y la salvación de todo.>>. Otra prueba fehaciente consiste en la representación de hombres con luengas barbas y con el bigote afeitado. En cuanto a su empleo entre los romanos, fue tan general que durante los cuatro siglos que separan los tiempos de Alejandro Magno de los de Adriano, la costumbre imponía la rasuración absoluta. Petronio (Satiricón, 103), Plinio (Hist. Nat. XXII, 47. 3, y XXIX, 34, 2), Marcial (II, 66; VII, 61, 7, y XI, 58), Suetonio (Calígula, 25), Lampronio (Heliogábalo, XXXI) y otros mencionan la navaja. Un verso de Marcial ha servido de base á la argumentación de Helbig para sostener que las hojas de bronce usadas por los griegos para afeitarse tenían forma de media luna.
Las navajas pertenecientes á la Edad de Hierro estaban montadas en mangos de hueso ó de madera dura, pero ya muy entrada esta Edad persistieron las navajas de bronce, sin duda á causa del espíritu ultraconservador de los romanos. Aun en la actualidad los bonzos de Indo-China deben de afeitarse, según sus reglas, con navajas de bronce. Las navajas de la Edad de Bronce forman dos grandes series: las de un solo corte, como las navajas barberas, ya las de dos, como las de seguridad más modernas.
Estas últimas, llamadas también maquinillas de afeitar, de forma muy variable, reunen las ventajas de que su disposición permite afeitarse por sí mismo aun á los individuos que tengan menor destreza, y esto con el menor riesgo posible de cortarse. Las láminas adjuntas dan clara idea de las navajas más antiguas y de las formas más perfeccionadas de las modernas.

22 Me gusta

Muy interesante y didáctico. Gracias por el aporte compañero :ok_hand:

2 Me gusta

Muy interesante Diego :+1:
Lo movemos a enciclopedia del afeitado para que no se pierda.

2 Me gusta

Gracias, edito la entrada

2 Me gusta

Muy interesante!! Gracias por la información! Un saludo

1 me gusta

Gracias. Es muy interesante

1 me gusta

Muy interesante Diego gracias por compartir.

1 me gusta

gracias Diego

1 me gusta