Desarrollo una idea que a más de uno nos debe haber pasado por la cabeza.
RELATOS CORTOS
EL BARBERO DE SEVILLA
Juan estaba aburrido en su barbería mirando “Así es la vida” en Tele 5, cuando de pronto entraron tres jóvenes yeyé de las denominadas “canis”, o “chonis”, no las sabía distinguir: sudaderas de vivos colores, colas de caballo, pantalones enseñando el ombligo y cara de insolentes.
- Buenaaas ¿Estas libre?
De primeras Juan se acojonó, la verdad.
- Adelante ¿qué desean?
- Mira, queremos afeitarnos, ji ji.
- ¿?
- Eso… (bajito) el trigimino.
- ¿Perdón?
- (Una de las otras) ¡EL CHICHI!
Caramba, por fin un nuevo desafío, pensó Juan. Más o menos debía ser como afeitar una barba, o no, ni idea, bueno ya vería.
- Por supuesto. El “pubis” señorita, hable con propiedad ¿Quién va a ser la primera?
- ¡Yo!
La rubita de bote dió un saltito y se sentó alegremente en el sillón de barbero, las otras dos se sentaron en el fondo con el móvil en la mano.
- (Ella) ¡Qué fuerte, tías, qué fuerte!
Juan comenzó metódicamente a preparar los apeos.
- (Juan) Bueno, pues sáquese los pantalones del chándal, y lo otro, claro.
- Es que se me pega el culo al sillón.
- Claro, porque es polipiel. Mire, levante y ponemos una toallita… y de paso subimos la butaca todo lo que dé de sí. ¡Ops! Ya está.
- ¡Mucho mejor!
Y ahí estaba la moza, sentada en porretas con su camiseta de tirantes y sus “zapas” gigantescas. Pelo rizado negro ¡lo sabía! No había más que mirarle las cejas.
- Mire, separe las piernas, o mejor póngalas encima de los brazos del sillón.
- ¿Así? dijo ella burlona.
Juan encendió su nueva recortadora de barba a pilas marca Braun y comenzó a reducir el matojo…
Ñññññiiiiiu (un soplido) ñññññññiiiu.
- Pues mañana parece que va a llover que mucha falta le hace al campo este año es el más seco por lo del cambio climático por cierto qué mal el Betis con el Celta a este paso se van a segunda…
Ñññññññññññíu, ñiu ñiu ñiú
- ¡Qué fuerte tías! ¡AY!
Ñññññiiiiiu, ñññññññiiiu.
Fase uno completada. Juan le pasó con presteza el brochón quitapelos y comenzó a asentar la navaja en la tira de cuero de potro. La joven se giró hacia sus amigas.
- ¡Mirad tías!
- ¡Uala, se te ve toa la almeja tiiía !
- Jua jua jua.
Juan con profesionalidad pasó la escoba, giró de nuevo la butaca y le pegó unos chuflos de agua, para ir ablandando.
- Tengo frío…
- ¿Cómo lo quiere?
- Que se vea todo.
Juan comenzó a espumar una cantidad generosa de Lea Mentolada. Usaría brocha sintética, cuestión de higiene. Comenzó a aplicarle la espuma enérgicamente en círculos, levantando espuma, pero la joven se estaba inquietando, así que siguió más lentamente con pases de barbero verticales. Ahora la joven parecía más relajada, había cerrado los ojos.
- ¡Empezamos! Le voy a poner la mano debajo del ombligo para estirar la piel, no se asuste.
Juan puso la mano y estiró. Luego con movimientos precisos afeitó toda la parte superior.
- Mmmmm
- ¿Tiene frío?
- Noooo
Ahora venía lo más complicado, los lados. Le daba miedo hacerle un pequeño corte y tener que recurrir a la piedra de alumbre.
- Mire, ahora mejor me pongo de rodillas y usted apoya la pierna sobre mi hombro ¿ok?
Se abrió la puerta y un tipo se asomó con los ojos como platos.
- Juan ¿tienes para mucho?
- Media hora chato, vete a comer unos sobaos y estoy por ti.
Las dos colegas se acercaron entre risitas para verlo todo más de cerca. Una de ellas iba a hacer fotos y subirlo a Instagram.
- (Ella) ¡Qué fuerte tías!
- (Juan) Ahora estese quieta por favor…
Juan puso el dedo sobre lo que debía ser el clítoris (parecía que llevaba un chicle pegado) y estiró la piel con decisión. Tris, tris, tris! Luego la parte interior de la pierna, pases largos… Ziiiiip, ziiiip. Estupendo, daba gusto trabajar con este pelo.
- (Ella) Aaahh
- Ahora la otra pierna, por favor.
Tris, tris, tris… ziiiiip!
¡Listo! Juan se incorporó, le pegó cuatro chuflos de agua y contempló su obra satisfecho. Tal vez un poco enrojecido, pero perfecto. Había sido coser y cantar. Lo añadiría en la sección “Aptitudes” de su perfil en LinkedIn.
- Pues ya está, señorita. No va a hacer falta otro pase. Tiene usted muy buena piel, jovencita.
- ¿¿Ya está??
- Casi, falta lo más importante. Tome esta toallita y séquese.
Juan agarró el botellón de Mentolado Vigoroso.
-
(Juan) Le pongo un chorrete de after en las manos y usted misma se lo aplica dando palmaditas, tap tap tap, ya verá que bien.
-
(Ella) ¿Así?
. -
AAAAAAAAAARRRRRRRRRRRRRRRRGGGGGGG !!!
