Se trata de un jabón natural producido por “Faena”, pequeña empresa familiar sita en la Isla de Lesbos (Grecia).
Según la información extraída de su propia Web, el fundador manifiesta que todos sus productos (además de jabón de afeitar fabrican otros cosméticos) son de origen orgánico y fruto de los estudios llevados a cabo durante 7 años en los Estados Unidos.
Además se jacta diciendo que el ingrediente estrella de sus productos es el aceite de oliva orgánico certificado, el cual por cierto no aparece en la lista de ingredientes.
No se, a mi estas empresas que hacen descripciones tan rimbombantes sobre si mismos no me gustan ni un pelo.
Formulación/ingredientes: En la foto lo veis:
A destacar tres ingredientes.
Por un lado la lanolina, que a mi personalmente me gusta. Por otro la arcilla (clay) que le da al jabón una capacidad de deslizamiento “extra” y por otro lado el geogard 221 que es un conservante y aglutinante que se usa como alternativa a los parabenos y cuyo uso está poco extendido.
Quiero hacer un inciso y decir que el Mirto no aparece como ingrediente, asi que supongo que ira en forma de aceite esencial (parfum). El mirto tiene un uso meramente aromático, si bien tiene cierta cantidad de taninos, no mucha, de conocidas propiedades antioxidantes.
Presentación: Este jabón es de 120 gr. y se presenta en forma de pastilla redonda envuelta en papel y dentro de un envase de plástico que cierra a rosca. Este conjunto viene dentro de una elegante caja de cartón. Para mi es una presentación correcta, si bien podría haber sido de menores dimensiones ya que el envase es ostensiblemente mas grande que la pastilla de jabón, por lo que ocupa un espacio innecesario y que en casos como el mío se está convirtiendo en un bien muy apreciado.
De todas formas al ser un jabón blando, hago con el lo mismo que con los Mystic o los Pannacrema y es aplastar la pastilla con una cuchara dentro del envase para que no “baile” ésta a la hora de cargar.
Longevidad/duración: Por debajo de la media. Se trata de un jabón blando y se vienen a utilizar unos 2 gramos por afeitado, con lo que nos da para unos 60 afeitados.
Carga requerida: Media/Alta. Estos jabones con sebo requieren mas carga que la media.
Capacidad de hacer espuma: Normal. Hace espuma sin dificultad pero en una cantidad moderada teniendo en cuenta que requiere mas carga de lo habitual.
Este es el resultado de la primera batida con el agua que retiene la brocha
escurrida.
Tras añadir unas 10 gotas de agua.
Tras añadir otras 10 gotas de agua ya está lista la espuma (en el suribachi hay otro tanto como el que aparece en la foto).
Ratio agua/jabón: Admite agua sin problemas y la espuma no se “corta” con facilidad. La única precaución que hay que tener es que el agua esté tibia, por el consabido problema que existe entre la lanolina y la temperatura.
Calidad de la espuma: Excelente, aquí si que no se le puede poner ningún pero.
Protección y deslizamiento de la hoja: Muy buena. Mucho deslizamiento, por lo tanto mucha protección y como consecuencia ninguna irritación.
Sensación en la cara: Totalmente neutra.
Hidratación y postafeitado: Muy buenos ambos aspectos. Es lo que tiene la lanolina, que puede gustar o no, pero sus propiedades son indiscutibles.
Aroma: Es el peor aspecto de estos jabones. Este concretamente huele a Coca-Cola. Si, si habéis leído bien, Coca-Cola. A los dos o tres minutos, debido a la oxidación el aroma evoluciona y se convierte en un aroma que a mi me recuerda al esparto.
No se, es una sensación rara. Yo no digo que huela mal, pero tampoco bien. Huele raro.
Precio: Son 16,95€. Considero que es caro.
Precio por afeitado: 0,28€.
Recomendado: A pesar de ser en conjunto un buen jabón, yo NO lo recomiendo ya que por menos precio hay productos en el mercado que dan iguales prestaciones y huelen mucho mejor.