Buenas noches, esta es la primera revisión que hago para este foro, y como no he visto este producto posteado, me he decidido.
Lo primero que tengo que decir es remitirme a la excelente revisión del compañero @HarryLime del bálsamo de la misma marca. Nada hay que pueda añadir a la contextualización del producto, en especial en cuanto a los valores y filosofía de la marca.
Me animó a publicar la revisión el hecho de que el bálsamo Weleda es desde hace tiempo uno de los productos favoritos entre los aficionados al AC en todo el mundo, pero no así su hermana-loción. Quizá se deba a que si el bálsamo deja el listón tan alto, la loción frustra las expectativas de quien pretendía una traslación de lo bueno de este a una fórmula alcohólica y más líquida, más apta para pieles mixtas o grasas, o bien para utilizar en verano, por ejemplo.
Nunca en varios años había pensado en comprarla. El bálsamo sí que es uno de mis habituales, sobre todo en invierno o cuando hace mucho frio, su capacidad para regenerar la piel y poder exponerla al instante al frío o al viento es encomiable. En muchos foros leía sobre lo desmerecida que era esta loción, que si no estaba a la altura del bálsamo, etc.
Este verano, de viaje en Alemania, se me ocurrió entrar en un establecimiento de la cadena Alnatura (eco), a por un tentempié para la niña, y en la zona de cosméticos además de Speick, y otras marcas extrañísimas para mí (supongo que de limitada distribución local), -tranquilos, nada sobre afeitado más allá de Speick y Weleda-, la vi.
La compré y la probé a la mañana siguiente. Y otros días más en combinación con jabones, cremas, brochas y maquinillas de diverso tipo.Hasta hoy, que está consumida al 70%. Por supuesto que no la he utilizado como previo a un afeitado con máquina eléctrica, sí como preparación al afeitado, por probar. Pero no se nota nada en absoluto. La he utilizado como una loción al uso. Digo esto porque expresamente la marca lo publicita como compatible como preparación al afeitado, y yo no es que lo desaconseje, sino que no he percibido nada que pueda respaldar ese uso. Ni tengo piel sensible, ni tampoco una roca. Mi barba es normal, ni dura o tirando a dura, ni tampoco tengo un pelo que se corte con facilidad. Soy un sujeto bastante neutro para experimentar. Si algo irrita, me irritará, si protege, me protegerá, y si la hoja corta demasiado o estoy torpe, me cortaré. Todo dentro del margen de tolerancia estándar.
Y es curioso que -y es mi opinión- no pueda decir nada malo de esta loción, pero tampoco nada bueno. Es un producto que resulta muy complicado, siendo objetivos, categorizar. No es una loción que castigue la piel más que cualquier otra con alcohol, ni tampoco la deja especialmente reconfortada. Veamos.
PRESENTACIÓN: En mi caso venía en la típica caja azul de Weleda -reciclable, por supuesto-, con los ingredientes en el reverso. Al contrario que cualquiera de los productos de esta marca que se puedan comprar aquí,que son multilingües, al adquirirlo allí, sólo se rotula en alemán (supongo que para los mercados alemán, austríaco y suizo en exclusiva).
COMPOSICIÓN: Como tiré la caja a la mañana siguiente, y aunque no la tirase poco entendería, os transcribo los que la página web de la marca en España señala como ingredientes; Alcohol / Agua destilada de hamamelis / Extracto de mirra / Aceites esenciales naturales / Limoneno / Linalool / Citral / Cumarina / Farnesol.
No dudo de la buena intención de la marca, y del predominio de los aceites naturales, pero lo cierto es que la cantidad de alcohol que contiene y cómo se manifiesta en cuanto se aplica en la cara, parece que los diluye. No sé en qué porcentaje los contiene, pero tras un par de minutos se nota la presencia de los aceites, que desaparece al cabo de otros 3 o 4 minutos. Insisto, en mi caso particular. Curiosa formulación. Meritoria para quien le guste así, pero personalmente preferiría notar algo más de cuidado en la piel durante un rato. En ningún caso llega a resultar grasa como el bálsamo. Pero tampoco comparado con otras lociones más (Musgo Real, algo aceitosa) o menos ilustres (Floid por precio, que nadie se ofenda) se note que deje la piel tratada o preparada para lo que queda de día.
PRECIO: Creo que aquí tiene un precio parecido al del bálsamo, si bien me consta que es más complicado de conseguir, o al menos que figure en stock o disponible en el tipo de establecimientos que acostumbra a trabajar esta marca. En mi caso me hice con el por unos 5 euros. Allí todos estos productos (de Weleda) cuestan más o menos un 40% más baratos -los de Speick también- que aquí.
En resumen, para no ser injustos, pero también objetivos, sensaciones encontradas. Mediocre para algunos, malo para otros, y tolerable para los más conformistas. No me ha parecido un mal producto. Su valor añadido es ser fiel al espíritu de la marca, y proporcionar una alternativa ecológica a una loción. No lo critico por ello, pero en este caso creo que una formulación íntegramente natural no resulta compatible con una loción, en el sentido de “masaje” post-afeitado que nos gusta, estamos acostumbrados, y deseamos recibir. No es mala, no creo que merezca las críticas que recibe, pero tampoco me parece un producto en sensaciones y prestaciones a la altura de lo que nos tiene acostumbrado esta marca.
En mi caso, habiendo probado los 4 productos que tiene Weleda a la venta, y sin tener en cuenta su precio, la escala la componen en la parte más alta la crema facial de hombre (un 10), el bálsamo (9), la crema de afeitar (7) y esta loción (un 6 justito, de esos de profesor magnánimo de los de antes). Los que hayáis probado alguno os podéis hacer una idea de la percepción que mi cara tiene de esta loción. Y los muchos que sé que usáis el bálsamo, considerad que esto es una loción, y que no tiene las aspiraciones protectoras de aquel.
El que quiera probarla, que sea justo. Ahora bien, en mi caso pagué un precio razonable, pero los mismos 12 euros ahora a mediados de octubre, y costando lo mismo el bálsamo…Os dejo una foto de esta misma mañana, mientras preparaba todo para “mi momento”.
Saludos