- Pre: agua caliente y agua tibia jabonosa.
- Jabón: Castilla y Jabón
- Brocha: Druida Pau Ferro / Plisson
- Cuenco: “el definitivo”, de @Juan_Torre
- Navaja: Filarmónica 14 DT.
- Asentador: Proyet cuero ruso
- Post: espuma de confort, agua fría y Agua brava.
Estreno de este fantástico cuenco diseñado por el compañero @Juan_Torre, y no se le puede poner ni un pero.
El mío es de 15 cm, pero aun así hay que ser muy pero que muy burro para que la espuma se salga. Casi ni queriendo. Hice una prueba batiendo como en estado de frenesí, y como se ve en la foto, la espuma quedó al borde. Con los de mayor tamaño, supongo que desbordar la espuma es misión imposible.
La virola de la brocha, ni se ha arrimado a la pared del cuenco. Es una de las cosas que no me gustaba del “zarabachi”, que si me descuidaba, con algunas brochas, acababa chocando. En este cuento eso está claro que no pasará.
Me dio para cuatro pasadas y confort (normalmente hago 3 y confort, pero no quería desaprovechar tanta espuma).
Es muy ergonómico y ligero. Ambas cosas para mí son buenas, porque normalmente el cuenco se sujeta “a pulso” durante el espumado y tiene que soportar la presión y los envites de la brocha. Pero lo de ligero, reconozco que pueda haber quien no lo vea como ventaja, y prefiera sentir algo más de peso. En cualquier caso, al tener el “asa” para el pulgar, la sensación de seguridad y control es total.
La ligereza puede hacer pensar que es endeble, pero nada más lejos de la realidad. Rígido y firme como si fuese de cerámica o vidrio. Ni presionando fuerte con el dedo cede.
Un último apunte, a modo de recordatorio para mí mismo. Si pones el jabón en el dibujo central, puede que al final del espumado quede, como me ha pasado hoy a mí, algún pequeño resto en la zona de las gafas del barbudo del foro. Creo que es mejor colocarlo más hacia afuera, porque los movimientos de la brocha, predominantemente circulares, acabarán llevándose por delante y convirtiendo en espuma hasta el último miligramo de jabón.
Mención especial también para el “Castilla y Jabón”, al que tengo un especial cariño, y que es un espectáculo para los sentidos.