Leyendo con algo de nostalgia que desaparece nuestra emblemática casa Vie - Long , he encontrado en la web ,cómo se fabricaban las brochas de afeitar Vie-long.
Hoy os mostramos cómo se fabrican las brochas de afeitar Vie-long, de lo mejorcito que tenemos en el mercado nacional e internacional.
Las brochas de afeitar son un producto clásico que está viviendo una 2ª juventud gracias a la vuelta del afeitado clásico en barberías y peluquerías de caballeros.
La marca Vie – Long lleva más de 75 años, concretamente desde 1940, fabricando en Valencia de forma artesanal brochas de barbero que exporta a todo el mundo.
De toda la gama disponible hay 2 tipos de brocha que suelen ser los preferidos por los profesionales de la barbería, son las de pelo de caballo y las de pelo de tejón.
Primero os explicaremos cómo se fabrican las brochas de pelo de caballo.
El proceso empieza con unas barras de resina que son torneadas y pulidas para acabar teniendo el cuidadísimo aspecto una vez que la brocha está terminada.
Por otro lado llega el pelo. Vie-long es el único fabricante de brochas de afeitar destacado en todo el mundo que utiliza pelo de caballo -además de los más habituales de tejón y de cerda-. El pelo que se usa en brochas de afeitar suele ser de diferentes animales, tejón, caballo y cerdo, y para la fabricación de algunas brochas se mezcla. Siempre se le somete a un intenso proceso previo de lavado y hervido para esterilizarlo completamente tal como dictan las estrictas normas de seguridad comunitaria. Después de ese tratamiento es cortado y agrupado para presentar un aspecto homogéneo.
Vie-Long dispone en exclusiva de una máquina (de la que no hay imágenes porque es uno de los secretos de su éxito) que permite hacer de forma automática y rápida el «nudo» de pelo de la brocha. Esto hace posible que las brochas de pelo de caballo acaben teniendo un coste muy competitivo. Después de pasar por la máquina los nudos quedan como en la imagen.
En una línea de producción avanzan los mangos de la brocha, que una vez están torneados y pulidos les llega el momento de ser serigrafiados uno a uno con el logo de la empresa.
Así quedan los mangos de las brochas antes de unirse a los nudos correspondientes
Las brochas y los mangos se unen manualmente, con un pegamento resistente que asegura que la brocha no se desmontará aunque trabaje duramente día a día en el complicado entorno de agua y jabón.
Una vez completada esa unión solo queda dar forma al nudo de pelos torneándolos con una máquina para que el momento del enjabonado del rostro antes del afeitado sea mucho más cómodo.
Ahora sí, las brochas están terminadas y listas para ser usadas.
Para la fabricación de las brochas de pelo de tejón el proceso es diferente en algunos puntos, lo primero es que este tipo de pelo no puede tratarse a máquina al ser mucho más delicado ya que se pesa la cantidad necesaria manualmente brocha a brocha.
Se pesa el pelo que llevará cada brocha de Vie-Long con una antigua pero precisa balanza, dicho peso variará según el modelo ya que en algunos el nudo es mayor y, por tanto, requiere de más pelo.
Una vez pesado el pelo es cepillado concienzudamente con unos peines especiales para quitar cualquier enredo.
Una vez cepillado el pelo se coloca en unos recipientes metálicos que son los que ayudaran a darle la forma que cada modelo requiere. Se colocan sobre una máquina vibradora que hace que estos se coloquen de forma alineada para que el nudo vaya tomando la forma que tendrá luego.
Después el mazo de pelo se coloca en una máquina en un proceso que une el nudo en tres pasos: primero se coloca el pelo con su recipiente.
Después lo comprime con un tipo de abrazadera metálica.
Y al final unas manos expertas colocan la anilla que mantendrá unido el nudo y que hace posible pegarlo después a su mango.
Un último ajuste de esa mano experta da forma al nudo para que la brocha quede perfecta.
Y ya tenemos un mazo de excelente pelo de tejón capaz de proporcionar el más suave de los afeitados. El último paso será unirlo al mango que le corresponda.
Antiguamente el proceso era aún mucho más artesanal ya que los nudos se anudaban a mano uno a uno mediante hilos, una tradición en Vie-Long.
Las brochas más caras -y para los puristas las más hermosas- utilizan en sus mangos materiales naturales como el asta de toro. En la imagen podemos ver el material tal y como llega a los talleres de Vie-Long y el resultado final de una brocha fabricada con ese mango.
