Siguiendo con el comentario de @FranMad y otros, sobre la generosidad de Gabriel, os cuento un sucedido.
Yo solía ir a comer con Gabriel a La Tercera, restaurant perteneciente a nuestro compañero Alfonso @Alfie. Y, como ya éramos casi habituales, Alfonso nos llamaba, con cierta sorna, la “pareja de hecho”.
Una de las veces, me dijo Gabriel:
Mira lo que me ha pasado. Se me ha caído esta navaja. Y me enseña una navaja de Antonio Pedrosa con una ligera mella en el filo.
Cada vez que la veo, dijo Gabriel, me entra tal cabreo que he decidido que no me voy a cabrear más. Así que te la regalo. Yo le contesté:
-No hombre no, yo te la arreglo y queda como nueva.
Que no, que no. La seguiría viendo con la mella y le tomaría manía. Así que quédatela y ya la arreglas y la pones en marcha.
La arreglé y puedo decir que soy uno de los afortunados poseedores de una navaja Antonio Pedrosa, gracias a la generosidad de Gabriel.
Naturalmente esta noche me pienso afeitar con la Pedrosa, en recuerdo de nuestro amigo Gabriel.
¡Va por tí!
Paco mas tarde brindamos todos. A las 12. Tengo un Ximénez-Spinola preparado para eso.
De momento la Nochebuena comienza humilde con un vaso de Xibeca, unas tostadas con pantumaca, un poco de queso y fiambre de cabeza de jabalí, y un trozo de tortilla de patatas Palacios, del super.
Brindaré con vosotros, yo con un Ochoa moscatel, que gusta mucho aqui en casa. Me considero mal bebedor de PX aunque pueda parecer pecado. En casa como sabe Sandro y algún otro tiramos mas hacia Tokaji Aszú del que espero dar buena cuenta en Nochevieja.
He abierto la botella. Le he puesto el tape de nuevo. Y la saco al balcón, que tengo 12 grados al exterior. Que se atempere y pierda el frío de la nevera. A las 12 estará a punto. Las cosas planificadas como buen alemán.
Gracias por compartir estas historias tan buenas y entrañables. Esta noche yo también brindo, me he tenido que tomar la botella casi entera yo solo porque mi mujer es de más de vino tinto
Después del Viña Lidon (muy bueno y recomendable) seguimos con un cava brut nature de la tierra también, muy rico y diferente , para los dulces. He dudado si abrirlo para cenar directamente pero me la habría pimplado entera sin sofocarme.
Mañana será otro día, hoy vamos a disfrutar. A la salud de todos ustedes , por los que estamos …y por lo que nos han dejado. Salud!
Doc. Éstos caldos no son para echar al pollo al horno, primer aviso , ésto se bebe fresquito y a palo seco, copón bendito!
Para el horno podrá valer también. Igual con la efervescencia del carbónico facilita la limpieza, que es sabido que limpiar el horno es tarea no fácil. Ya nos haremos unos intercambios. Abrazo.
@Ruben, nada de parroquia supongo, todos en su casa y Dios en casa de cada uno. Mochuelo en el nido, pero que bien se está , afortunados por seguir leyéndonos y escribiéndonos, quedan muchas páginas por escribir del “He pegado al camarero…” y aquí nos tendrás para leerlas.
Gracias Paco por esa semblanza que, aunque apenas alcanza a describir a Gabriel, pero que gracias a tu elocuencia ayuda a hacerse una idea a aquellos que no lo conocieron, de la enorme persona que fué.