Haz tus propios jabones

Mentolar cualquier jabón.

Caballeros, alguna vez se han planteado para esos días de calor usar un jabón de afeitar con mentol para refrescar?

Tenía una crema lea classic que de usarla tan poco dejó de ser crema, no estaba en buen estado y terminó en la basura.
Por lo tanto, no tengo ningún mentolado en mi arsenal. Simplemente porque no lo usaría mucho salvo en raras ocasiones y de usarlo tan poco posiblemente vuelva a terminar en la basura. Por otro lado, si lo tuviese, estaría atascado con ese jabón los días que me pide el cuerpo un poco de frescor durante el afeitado.

Realmente, lo que andaba buscando, y lo que me gustaría, es tener algo que pueda agregar a cualquier jabón y poder darle ese toque de frescor. Poder ajustar el toque de mentol al gusto, sin estar sujeto a lo que el fabricante o artesano haya agregado a su formula magistral. Al fin y al cabo, a todos no nos gusta lo mismo y aquí juega un papel importante las preferencias personales de cada uno. Por otro lado tiene que ser algo que no contenga alcohol y pueda estropear la espuma o el jabón.

Si se han planteado este dilema y les interesa, sigan leyendo.

Hay varias alternativas.

  1. Usar un sintético comercial con el principio activo del mentol. Estos sintéticos los desarrollaron en la industria para mentolar el tabaco, curioso. Algo que ha adoptado recientemente la industria del vape. Unas moléculas que dan ese golpe de frescor estimulando nuestros receptores del frio. Productos son muy complicados de encontrar y de compra en USA, por no decir casi imposible.
  2. Darle la murga a algún fabricante, o artesano, para que haga o lance un jabón mentolado. Pero aquí tenemos varios problemas: el primero son las cantidades de mentol, el segundo es estar atascado con ese jabón y, el tercero, la demanda de jabones con mentol no es muy grande por lo que es posible que no les resulte rentables y dar salida.
  3. Agregar mentol al jabón. Pero como sabrán, el mentol tiene una forma cristalina a temperatura ambiente. Si se disuelve en alcohol tras fundirlo, se puede agregar al masaje, pero no al jabón puesto que se lo podría cargar. Incluso machacándolo, y pulverizarlo, el efecto mentolado no están grande. Además, resulta incomodo machacar mentol cada vez que queramos darnos un pelotazo de frescor. Me imagino a vuestras mercedes machacando mentol en el baño como si se estuviesen preparando una rayita. Disculpen mi imaginación.
  4. Mentol liquido para poderlo usar cómodamente.

Pues eso es lo que me preparé ayer, mentol liquido para poderlo meter en un dispensador y poder aliñar a cualquier jabón, a gusto del consumidor, para cuando me pida el cuerpo ese golpe de frescor durante el afeitado.

Para que nos entendamos. Pasar es cristal de mentol a un liquido a temperatura ambiente y poder dispensarlo a gusto del consumidor.

Algo así:

Para los lectores del hilo del afeitado del día, habrán visto que lo he estado usando estos días y descrito junto con el jabón como mentol liquido.

En el afeitado de hoy, lo he vuelto a usar y ha resultado un afeitado la mar de agradable, fresquito, sin cargarse la fragancia del jabón, sin ojos llorosos y sin ser invasivo. Use 3 gotas, pero voy a bajar a 2 que se ajusta más a mis preferencias personales.

Espero que les haya gustado esta entrada, que aunque no este muy relacionada con la fabricación de jabones, si con su aliño.

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