Compañeros y amigos, gracias a todos por vuestros ánimos y buenos deseos, sois muy grandes.
Os cuento que muy a pesar mío hube de sacar al paciente del hospital, las circunstancias de cada uno son las que son y cada noche del gato allí me salía por 160€ y llegó un momento en que no podía asumir ese gasto. El caso es que al menos lo peor había pasado, y en casa a base de cuidados, forzar alimentación, pincharle en una vía intravenosa y mimarle mucho el peludo ha ido mejorando hasta estar no al 100% pero ya fuera de peligro.
Ya va comiendo el solo, tiene ánimos para discutir con su compañera Ena de vez en cuando, el color de su piel y mucosas ya no es amarillo y hasta se mueve por toda la casa y empieza a subirse a sitios.
Me ha dejado tieso tieso tieso económicamente, y sin margen de maniobra para unos meses, pero ver a mis hijos de 7 y 5 años abrazarlo y darle besos no se paga con dinero.
Ojo los que tengáis mininos, muy atentos a si dejan de comer, resulta que si dejan de alimentarse (por el motivo que sea) su cuerpo reacciona enviando grasa al hígado que no puede procesarla toda y se va a acumulando en el mismo como si fuera el de una oca para producir foei grass.
El caso es que esto acaba por hacer colapsar el hígado con el resultado de un 90% de mortalidad en gatos no tratados o tratados tarde
En la primera analítica había parametros del hígado que multiplicaban por 12, 20 y hasta 60 los supuestos valores máximos, de hecho se la repitieron porque la veterinaria no podía creerlo y mucho menos que el gato estuviese vivo con semejante hígado.
Lo dicho, gracias a todos y ojo con los compañeros peludos.
Un abrazo